A UN AÑO DESPUES DE ESTAR EN CAUTIVERIO COMO VOLUNTARIO.

¿Qué cosas son las que una persona puede aprender cuando se esta en cautiverio por un periodo de un año? ¿Y más cuando alguien ingresa como cautivo voluntario?

Cualquier persona pudiera pensar en alguien que ha cometido algún crimen y que desde una cárcel estuviera escribiendo esto, sin embargo la persona responsable de cometer un grave delito por lo menos justifica su permanencia tras las rejas. La otra realidad es que hay personas que tan solo cometieron el delito de ser pobres y vivir en la ignorancia por nacimiento o elección propia y estas tienen que someterse al yugo del cautiverio voluntario o involuntario.

¿Pero que tipo de sufrimiento tiene alguien privado de la libertad?
Quizás la intensidad el sufrimiento dependa de las condiciones en que vive la persona en cautiverio. Sin embargo para cualquier caso, vivir en cautiverio puede provocar distintos trastornos en la mente.
Personas muy respetables como Victor Frankl en su libro llamado “El hombre en busca de sentido” analizo esta situación poniendo como ejemplo lo que el mismo experimentó como prisionero en un campo de concentración durante la segunda guerra mundial. Enojo, irritabilidad, apatía, depresión, perdida del sentido del tiempo (paradójicamente los días son mas largos que las semanas), insensibilidad al dolor ajeno, fatiga constante, insomnio, pesadez y conformismo, desesperación, frustración, agresividad, la esperanza a un mejor futuro se vuelve confuso y borroso son algunas síntomas que el señor Frankl menciona sobre alguien que ha permanecido en cautiverio por largo tiempo y en las atroces condiciones del Holocausto.


“La ultima de las libertades humanas-la elección de la actitud personal que debe adoptar frente al destino-para decidir su propio camino.”

Victor Frankl; en el Hombre en busca de sentido.

En la actualidad, el año 2011 nuestro sistema político y económico mexicano ha provocado un desequilibrio radical en muchos “estratos marginales de la población”, los también llamados “índice de población económicamente vulnerable” o también mejor conocidos como “Los Pobres”, encajonándolos poco a poco a una situación parecida a una prisión camuflada en donde la cárcel ha sido sustituida, si bien le va, por una casa de interés social, y su condena durará los mismos años en que pueda pagar por completo su Deuda y hasta que logre ahorrar algo de su raquítico sueldo que le queda cuando se hace responsable de mantener a su familia. Este mecanismo de explotación ha hecho que muchas personas nulifiquen sus opciones de crecimiento personal e intelectual por tratar de cubrir sus necesidades básicas con apenas el sueldo que ganan. Sin embargo la necesidad del ser humano por auto realizarse puede distorsionarse cuando no encuentra los medios adecuados, y para satisfacer esto, muchos empresarios nos tienden la trampa de la ambición por tener lujos materiales y a veces innecesarios para subsanar esa necesidad, empobreciendo mas al pobre y mantenerlo mas atrapado en un fango pegajoso llamado Credito y Deuda. Este sistema de control y dominación ha hecho que por lo menos 2 generaciones muy cercanas a mí no puedan encontrar la salida y lamentablemente parece que la continuidad de esta estrategia económica y política recaerá en la siguiente generación. El estado de cautiverio continúa. Vaya que existe bastante polémica al respecto.

Regresando al tema principal, estoy seguro que después de tantos años de investigaciones al respecto sobre la psicología del quien se encuentra en cautiverio voluntario o involuntario, se pueden sacar muchas conclusiones e incluso las recomendaciones para una recuperación psicoterapéutica o psiquiatrica en el caso de que se intente rescatar y reintregrar estas personas a la sociedad. Sin embargo también hago suponer de la existencia sobre mecanismos y procesos maquiavelicos para no rescatar, ni para reintegrar a estas personas, para esclavizarlas mas, para doblegarlas al látigo de sus domadores, para disminuir sus niveles de conciencia, de protesta, para mitigar sus anhelos y sus sueños aplastándolos hasta alcanzar solamente el anhelo a las necesidades mas básicas de sobrevivencia que tiene el ser humano. Este tipo de material al respecto seguramente lo han tenido en su biblioteca personal empresarios y políticos de alta y baja jerarquía, así como directores de instituciones gubernamentales y privadas.

Y es que incluso hasta de las situaciones mas graves y lamentables que puede vivir y experimentar una persona, pueden ayudar a darle sentido y significado a su futuro próximo, el cual nunca lo hubiera encontrado si no se hubiese padecido este capitulo oscuro en su vida. Tristemente este significado no puede llegar a los corazones de todos los prisioneros, ya que como dice Victor, muchos terminan por caer en un sopor progresivo dentro de este laberinto el cual terminan solamente por hacerlos vegetar toda su vida mientras dure su cautiverio.

Y ya que siempre las personas hablan de cómo les fue en la feria, personalmente quisiera responder a la primera pregunta que he dejado al aire:

¿Pero que puede aprender alguien que ha estado en cautiverio por un año?
+Humildad.
+Cooperación.
+Creatividad abundante.
+Paciencia.
+Espiritualidad.
+Aprender a decir te quiero.
+Generosidad.
+Respeto a quien respeto merece.
+Tolerancia a la frustración.
+Perseverancia.
+Disciplina.
+Fuerza de voluntad.
+Autocontrol y Autodominio.
+Responsabilidad.
+Madurez y Autoaprendizaje.

Finalmente, esto es un llamado a todos mis amigos los Obreros y a todos aquellos que se sientan atrapados en una prisión física o invisible: No permitan que la apatía, el conformismo, la falta de voluntad, el miedo y la incertidumbre acaben con su espíritu de transformar su historia de vida en algo que los enorgullezca.

D.B.R.R