Si aún
todavía los "enemigos" rondan cerca de nosotros esperando atacar, si cuando les
abrimos las puertas entran y provocan caos y desorden, si cuando aún los
enemigos desdeñan nuestras suaves palabras por insultos y provocaciones,
entonces quizas sea necesario reflexionar en las siguientes preguntas; ¿Dónde están
nuestros límites? ¿Hemos aprendido a poner límites a las personas?
¿Estamos
siendo demasiado condescendientes con ellos o con nosotros mismos? ¿Miramos
hacia otro lado cuando hay cosas que debemos resolver ya ahora mismo?
¿Somos
codependientes?
¿Nos da
miedo enfrentar a alguien y hacer valer nuestros derechos, hacernos respetar
como seres humanos?
¿Donde está
nuestra autoestima?
¿Nos
sentimos fuertes o débiles?
¿Por qué necesitamos
gente negativa, toxica y destructiva en nuestra vida?
¿Qué es lo
que hacemos inconscientemente para atraer este tipo de personas?
¿En que
tipos de ambientes, trabajo o actividades nos movemos y atraemos a estas
personas negativas?
¿Acaso
somos nosotros quienes intentamos y forzamos cambiar a las personas?
¿Acaso
queremos controlar, arreglar o imponer nuestra autoridad hacia los demás? ¿Podemos ver las cosas con
objetividad o caemos en dramas innecesarios?
¿Somos
capaces de mantener una conversación estable, constructiva y en armonía con
alguien más?
¿Cuándo hablamos
con alguien mas nuestro tema favorito es criticar, quejarse, hablar sobre el
drama de la vida o amargarse por lo que no tenemos y por lo que tuvimos una vez?
¿Cómo es
nuestra forma de hablar o de comunicarnos con los demás? ¿Gritamos, estamos
tensos, lloramos con facilidad, o guardamos silencio cuando queremos decir algo?
¿Sabemos
controlar nuestras emociones?
¿Conocemos
nuestras emociones?
¿Qué cambios
químicos suceden en nuestro cuerpo cuando estamos enfrente de personas
negativas (H.D.P)?
¿Conoces y
estas consciente de lo que sucede en tu cuerpo cuando estas bajo estrés, bajo
ansiedad, bajo depresión o en un arranque de enojo y explosividad?
El tema dá
para mucho más, inclusive nos daria mucha información para olvidarnos un poco de esos supuestos “enemigos”
o gente toxica H.D.P que llegan a nuestra vida para empezar a trabajar en nosotros
mismos, para comenzar esa transformación que queremos, para que mejores cosas y
mejores personas lleguen a nuestra vida. Todo está en conocernos un poco más para tomar
mejores decisiones en cuanto a nuestro propio comportamiento ante la vida y los
demás, siendo honestos con lo que realmente buscamos en nuestra vida como propósito.
¿Cuál es tu verdadero propósito?
Perdonar
ayuda mucho, libera y sana. Sin embargo mientras se lleva a cabo ese lento proceso
de sanación, hay muchas cosas que debemos trabajar o resolver primero en
nosotros mismos, para ayudar a que ese proceso de liberación sea más fácil
y más rápido.
Mary67, sé que
dentro de ti ya tienes la solución.
Salud y Consciencia.
D.B.R.R
