SOSPECHAS DE UN JOVEN EN UN CONFESIONARIO.

JOVEN: Padre mío, comienzo a sospechar que el dinero es la esclavitud del hombre,
sospecho que las guerras solo buscan intereses económicos,
sospecho que mis padres ya no se aman,
sospecho que los políticos engañan a mi pueblo,
sospecho que alguien tiene un plan para moldear mi vida a como ellos quieren que sea,
sospecho que no soy libre,
sospecho que no somos la única forma de vida en este vasto universo,
sospecho que la ciencia puede explicarme todo lo que hasta ahora Dios no lo ha hecho,
sospecho que Dios es mudo y sordo,
sospecho que los humanos somos una especie mas de un zoológico universal,
sospecho que no hay vida después de la muerte,
sospecho que el bien y el mal no existen,
sospecho que nada es nuestro, todo es prestado,
sospecho que la mentira es mas común en casa que en cualquier lado,
sospecho que el amor no conoce razas, edades ni géneros ni ideologías; es libre,
sospecho que la historia de mi pueblo ha sido manipulada a conveniencia,
sospecho que los verdaderos héroes y gente de honor no figuran en los libros de historia,
sospecho que el miedo es un arma para controlar a las personas,
y sobre todo comienzo a sospechar que Dios ni el Diablo existen, y también sospecho que usted no deja de verme las piernas…

PADRE: Pero que cosas dices hijo mío. Veo que tu espíritu esta perturbado y que no esta en paz… siéntate allí y ponte a orar.

Y entonces el joven se puso a orar fervientemente.

D.B.R.R-