A lo largo de los años que he vivido, me he dado cuenta que los pretextos dentro de la familia han evolucionado. Algunos dirán que los pretextos son simplemente palabras o frases evasivas y otros un arte que aparentemente les ha hecho la vida mas fácil. La voluntad y la disponibilidad de cada persona juegan un papel determinante en la relaciones humanas, pero en muchas ocasiones los pretextos son el escudo perfecto para cubrir miedos, apatías, enojos, vergüenzas, ignorancia, enfermedades y mas.
En muchas ocasiones la sinceridad es mejor que dar miles de pretextos y así no reír ante la evolución de ellos dentro de un núcleo familiar.
“Al ratito” - ( a los 4 años).
“Ya te dije que no puedo” ( a los 7 años).
“Dile a tu mama y viceversa” ( a los 10 años ).
“No nos han pagado hijo” ( a los 11 años).
“No tengo tiempo” ( a los 17 años).
“No tengo lana, no hay billete, con que dinero,” etc, etc. (actualmente).
Y dime; ¿cual es la evolución de tus pretextos familiares?
D.B.R.R
