El otro yo; a quien la
Ley Marítima se encarga de tener a los seres
humanos bajo sus reglas dentro de este patético sistema comercial, además
existen organizaciones que conocen bien este mega fraude y haciendo uso de practicas
ocultistas donde deliberadamente pueden vejar, enfermar, estafar, destruir y
obstaculizar física y mentalmente a las personas usando su nombre propio en
MAYUSCULAS, creando una figura ficticia para que esta aberrante practica no les
generen karma contra ellos. Pero que astutos y rapaces son estos brujos.
Pronto miles de seres humanos despertarán y se darán cuenta de esto y
las naciones serán libres de nuevo de estas oscuras entidades. Las personas
volverán a ser libres tal cual nacieron y tal cual llegaron a este mundo antes
de firmar el acta de nacimiento cuya propiedad es del Vaticano.
D.B.R.R