Mi nombre es Soem y desde ahora todas las legiones de Ángeles saben de mi existencia…Aun me encontraba intrigado por saber quien estaba detrás de estas nuevas y terribles ejecuciones. Al parecer se trataba de otro cazador sembrando por doquier atroces muertes a los Ángeles junto con la persona a la que estaban a su cuidado. Su forma de cazar no puedo llamarle de otra forma mas que un espectáculo grotesco, una manera abrupta y enfermiza de faltarle al respeto al cuerpo humano y a la tierra que acogían sus restos esparcidos de sus victimas como camposantos al aire libre.
Desde mi nacimiento he conocido muy de cerca a los Ángeles y nunca termino por maravillarme de ellos ya que son criaturas extraordinarias y no me explico como pueden caer ante su enemigo tan fácilmente y casi sin poner ninguna resistencia, según así lo indican las lecturas de las rocas que he hecho. Otra pista interesante que obtuve es que en sus restos de los Ángeles quedó impregnado un aroma muy particular, es un aroma que expelen ellos solo cuando sienten una tristeza profunda… al parecer este cazador de Ángeles sabe perfectamente lo que hace, no deja rastro alguno para identificar su procedencia. ¿Ahora me pregunto si esto tiene un propósito personal? Un cazador con semejante poder y fuerza el cual le permitiría seguir con sus ejecuciones sin que nadie le oponga resistencia ¿Porque necesita mantenerse en el anonimato, como si temiera el ser visto?
Sin ninguna respuesta decidí entonces emprender una nueva búsqueda para atrapar a este nuevo Cazador de Ángeles…
Una vez que todo estaba listo el primer paso para mi búsqueda fue comenzar con posibles testigos. Mis ergástulas se saturaban de Ángeles para interrogarlos, pero ninguno sabía nada al respecto, muchos incluso se aterrorizaban cuando les hablaba acerca de que había alguien más acechándolos sin piedad alguna. Pero todo fue en vano. Si hasta ahora los Ángeles no saben nada al respecto, entonces quizás los seres vivos que estaban cerca del lugar de los hechos hayan visto o sentido algo en particular. Sin embargo fue muy grande mi decepción al escuchar que lo único extraño que habían visto ellos era una luz intensa cegándolos, un sonido tan agudo que los ensordeció y los que eran ciegos solo sintieron un movimiento brusco de la tierra. Con esto me di cuenta que la intención de este cazador es permanecer en el anonimato. Ahora las únicas pistas eran las lecturas de las piedras en donde descansaban los restos de las victimas y ese particular aroma que había comentado antes.
Después de eso decidí buscar de nuevo aquel grupo de seis Ángeles los cuales fueron asignados y enviados por parte de su reina con la misión de investigar estos hechos. Pero en esta ocasión no quise ser sigiloso y me aparecí directamente ante ellos.
Al verme se sorprendieron tanto que cuatro de ellos retrocedieron inmediatamente y enseguida adoptaron una posición de combate sacando unas pequeñas dagas de color púrpura y un hermoso escudo brillante parecido a una concha de nácar. Gritándome a todo pulmón tremendas tropelías y amenazas con eliminarme si no me largaba de allí, los cuatro parecían mas asustados que con espíritu de pelea. Entonces se levantaron dos manos al mismo tiempo. Eran los dos Ángeles que no retrocedieron como los hicieron sus compañeros. Estos dos eran casi identicos y de un solo movimiento y al unísono les pidieron a los cuatro que guardaran silencio y que recuperaran su postura de descanso. Cuando me aparecí ante ellos fue extraño que esos dos se mostraran tranquilos y no se movieran, sin embargo nunca me quitaron los ojos de encima en todo el tiempo que estuve con ellos. Además me di cuenta que estos dos Ángeles eran gemelos y al parecer eran los lideres o jefes de la expedición pues cuando hablaron inmediatamente los cuatro restantes mostraron su subordinación ante ellos.
Los gemelos al unísono, como si se trataran de una misma persona me preguntaron con una exquisita parsimonia:
Gemelos: ¿Que es lo que quieres de nosotros Soem?
Soem: …
Gemelos: ¿Entonces a que has venido? ¿Es que vienes a tratarnos como si fuéramos tus presas?
Soem: …
Gemelos: Si vienes a cazarnos entonces estas cometiendo un grave error.
Soem: …
Gemelos: Ya debes saber que hay alguien aparte de ti, que se dedica a cazar Ángeles.
Soem: …
Gemelos: Al principio creíamos que se trataba de ti y de una nueva y oscura estrategia tuya; una especie de venganza por el mal rato que te hicieron pasar aquellos 113 Ángeles; sí, aquellos que encontraron la muerte en tus manos. Al menos hasta aquel entonces esas eran las conjeturas. Pero con el tiempo nos dimos cuenta de que no eras tú el responsable.
Te conocemos Soem, y sabemos que puedes transformarte en cualquier cosa que desees pero no puedes estar al mismo tiempo en dos dimensiones diferentes; la nuestra y la de los humanos. En ese sentido muchos de nuestros compañeros se ofrecieron como carnada para poder averiguar si eras tu quien cometía semejantes crímenes, “que en paz descansen ellos”.
Las pruebas que hemos hecho nos indican que hay alguien más que caza y asesina Ángeles junto con los humanos a los que están bajo su protección y cuidado. Así que nuestra misión ahora es seguir investigando y si es posible acabar con aquel Cazador de Ángeles.
Soem: …
Gemelos: Hasta ahora no sabemos que le preocupa mas a nuestra Reina; si tu desdichada presencia o la de este nuevo Cazador. Las legiones de Ángeles también están muy preocupadas, no solo por la seguridad de los nuestros, sino también por el efecto que pueda ocasionar estos nuevos acontecimientos a la cultura, sociedad y evolución de los seres humanos como especie. Como bien sabes, ahora que están comenzando los primeros derramamientos de sangre humana, el equilibrio de esta especie puede verse afectado a futuro.
Angel: Pero señor !! Tenemos prohibido decirle cualquier información a este maldito…
Gemelos: Silencio te pido compañero nuestro… lo único que hago es salvar nuestras vidas.
Angel: ¿como?...
Gemelos: Bien, entonces dinos Soem; ¿A que se debe tu visita? ¿Acaso te hemos dicho algo que hasta ahora no sabias?...
Soem: Lo único que no sabia es la preocupación de su Reina al respecto… lo demás no me interesa en absoluto. Sigan su camino, me retiro.
Gemelos: …
Soem: Ah!! Y por cierto, ustedes tienen un olor especial cuando están profundamente tristes…
Ángeles: ¿Qué quiso decir con?...
Gemelos: Gracias por decirlo Soem.
Así que Abandone enseguida a ese grupo de seis para regresar de nuevo a mis ergástulas. Había algo en particular que me inquietaba por investigar y que lo había dejada pasar por desapercibido, esto posiblemente podría resolver este enigma sobre la verdadera identidad de este nuevo y sanguinario asesino de Ángeles.
Continuara…
D.B.R.R